Este proyecto residencial está ubicado en un exclusivo fraccionamiento en Monterrey, Nuevo León. Con un terreno alargado y vistas panorámicas hacia las míticas montañas de la región, este proyecto residencial mantiene un lenguaje arquitectónico sobrio a través de sus muros exteriores e interiores en colores arena y espejos de agua rodeadas de vegetación que enriquecen la experiencia de la residencia.

 

La fachada de Encinos II se compone de 2 niveles, integrando una paleta de materiales como la cantera gris y acabados en madera en tono nogal que aportan calidez y sofisticación. Un elemento distintivo del diseño es un árbol que toma protagonismo en el diseño de la fachada al ser enmarcado por vigas de acero y estructura de la casa. La residencia integra colores neutros, vegetación y pequeños espejos de agua que funcionan como elementos de serenidad. 

 

Cada decisión de diseño cumple con los lineamientos del fraccionamiento y está alineado a las necesidades de la familia. Como brief inicial, la pareja solicitaba un lugar para compartir en familia, un elevador para poder desplazarse con facilidad y áreas sociales y privadas amplias. Cada recámara secundaria posee walk in closet, la recámara principal sobresale con una antesala, un librero que divide la habitación y un baño iluminado por luz natural.

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El uso de iluminación LED estratégica resalta elementos clave del diseño, como los remates visuales con árboles y piedras naturales en su forma original. Además, un elevador facilita el desplazamiento entre los niveles, garantizando comodidad y accesibilidad para todos los miembros de la familia. Encinos II es una residencia que logra un equilibrio entre modernidad, funcionalidad y conexión con el entorno natural, convirtiéndose en un hogar diseñado para disfrutar la vida familiar en armonía con el entorno.